negativo

miércoles, diciembre 05, 2007

Sobre abandonar el barco

Carajo. Pensé que ya había abandonado este barco. Pero siento que debo seguir esperando. ¿Hasta cuándo? ¿Quizás hasta que Timonela decida buscar a su único pasajero? ¿Hasta que se sincere consigo misma y se deje de huevadas? Porque ahora que lo veo, su primer sinceramiento no fue tan completo que digamos, aunque fue un inicio. Porque ella no quería aceptar lo que le -nos- pasaba y pensé que con lo que había sucedido entre ella y yo ya lo había aceptado del todo. Y me salió con una serie de huevadas -pantalla no más-. Pero me doy cuenta de que lo que pasa es que no, no termina de aceptarlo. Y me doy cuenta de que ¡está tan cagada como yo! Que le da vueltas a todo en su cabeza -¡como yo!-, lo cual me da risa, por cierto. Bastante. De alguna forma -retorcida- reconforta.
Pero claro, ¿y si es solo mi cabeza?
Estrés. Estrés. Estrés.