negativo

domingo, marzo 11, 2007

Más días que pasan

Los días pasan y todo está tan igual, tan gris, tan soso, tan perdido. No sé cómo llamar a nada de esto. Quizás no sea nada de esas cosas. Siento que la caída viene lenta, lenta y yo aquí sin ánimos de esperarla ni de combatirla. Inercia en todo. No quiero nada en verdad.
Y ahora que lo veo, como que ya no importa. Como que ya no importa incluso la desaprobación en las miradas, en las palabras. Tengo ganas de recluirme, pero ni sé exactamente para qué. No sé en qué etapa estoy realmente. Y no sé qué hacer. Si realmente es algo de lo que debo salir porque si no terminaré mal. Y no quiero volver a esos estados de ánimo. Pero pesa tan poco por otro lado. Creo que todo esto tiene tintes de abandono. Y me dejo caer y me sigo dejando caer.
No sé si esperar un poco más. Como que tengo un número de caminos en frente y no sé cual tomar si es que he de tomar uno de ellos y no quedarme exactamente en el punto en el que estoy. Obviamente no sé a dónde me llevará ninguno de ellos, con recorridos distintos pero con miras solo a M.
En resumen podría considerar dos opciones: seguir esperando un poco más o ya simplemente irme. Y eso de "simplemente irme" (pero irme con algo seguro) es una opción que recién considero de esa forma. Irme aunque luego tenga que regresar a resolver mis asuntos, ya tendré el capital para poder ir a M a estudiar. Siempre estuvo esa opción combinada con otros factores. Pero ahora aparece como una luz que siempre estuvo oculta. Y sus rayos me coquetean.
Y yo estoy harto, simplemente harto. Quizás la tome y aunque no es tan fácil como decir "ya, será esto" y simplemente hacerlo, quizás deba hacerlo así, no pensarlo mucho. Quizás así consiga safar de todo esto de una vez. De todo el estancamiento, la espera larga, la incertidumbre, el hartazgo, el vacío y todo eso para lo que ya no encuentro palabras.
Falta poco, falta muy poco..